martes, 2 de febrero de 2016

Poesía de Amores y Desamores (2)

Mujer cojedeña en el archivo de Carlos González


ÚNICAMENTE TU COLOR (Alberto José Pérez)
Únicamente poseo tu color que es mi piel
la brisa que tiende míos cabellos al norte
                                de tu respiración ajena
                                presumo el abandono de rutas
                                expande por mi cuerpo
                                sales de lujuria permanente
                                abárcame como el sol a las montañas
                                antes de vestirnos los ojos de relámpago


EL BESO (Manuel Osorio Calatrava)
Yo buscaba su alma en los temblores
de su voz cuando hablábamos, y había
una vaga y azul melancolía
en la plata lunar de los alcores.
Buscabala en sus cándidos rubores
cuando su mano estaba entre la mía,
y en la estrella lejana que encendía
sus ojos en celestes resplandores.
Yo buscaba su alma, hasta que un día
ardió la esquiva flor de sus pudores
en el oculto fuego en que yo ardía;
entonces, en un tálamo de flores
descubrí que su alma se escondía
en sus labios, divinos pecadores.


Versos de Anita Mendoza
También yo me dormiré
y entonces quizás te despiertes
y pienses esto que yo estoy pensando,
tal vez me imaginarás
enredada en algún árbol enmarañado
de los que sabes que me encantan
y me quieras alcanzar tocándome,
sacándome del mutismo
de estación de radio apagada,
volviéndome a traer hacia tu lado,
hacia el amor que nos dio el sueño.

Versos de Corina Noguera Arias
al sondear mis abismos
sembraste de alegría
el valle de mi ausencia,
esa ausencia de luz, amor
y estrellas, esa
la misma que sigue midiendo
mi tristeza. 

Imagen el archivo de Elena Marval



Poema de Nieves Clemente
De aquelarre era la noche
y tu vestido de brujo
hechizando aquel embrujo
el camafeo del broche.
Sin el adiós del reproche
nos vestimos lentamente.
El lecho aún ardiente
dueño era del secreto
donde te perdí el respeto

yendo acuñado en la frente


Poema de Danilo Mauricio Robinson Garcés
Sonámbulo en mi cáliz
Despierto. Y no recuerdo el roble
Amanece hace buen tiempo
Y me queda el recuerdo vago
De tu pecho sobre el mío


De MAGAS (Fragmentos. Faver Páez)
a su paso sumisas
se rendían las horas
eran las sorprendentes
soberanas de las maravillas
reinando sobre los deseos
y las sangres urgidas del verano
corriendo por la casa los domingos
como dos aguas vivas
repartiendo milagros de belleza
por los patios y los corredores

ardían de puro fuego interno
y cuando graciosas
asomaban sus rostros
al ventanal del día
detrás de sus cuerpos maduros
retozaban el gozo
y la delicia

no estoy seguro aún
pero sospecho que ellas fueron
las últimas magas de la tierra


Imagen en el archivo de Mariela Romero

Poema de Rafael Cadenas
Tú que caminas esta noche en la soledad de la calle, vas llena de besos que no has dado.
Del amor ignoras la escritura prodigiosa.
Aunque no me conoces, en mi cuerpo tiembla el mismo mar que en tus venas danza.

Recibe mis ojos milenarios, mi cuerpo repetido, el susurro de mi arena.


Imagen en el archivo de Hmendez Art Telier

2 (Mario Ledezma)
A qué cambiar de tiempo
si la nostalgia
anda que nos aprieta el cuerpo
el ruido de tu playa
encabrita mis días

Tú mi montaña
mi letra vocal
alga dolida de la piel
mi mar
tus fuentes de agua
marchan hacia otros ríos


NO ES POR LA PUNTA DE HIERRO 
(Víctor Manuel Pinto)
No es por la punta de hierro en las botas
que va despacio de un lado a otro
y equivoca las medidas de las llaves

Todavía carga
el malhumor de la mañana

cuando su mujer
sacó la cara hacia fuera
durante el beso de despedida.


Versos de Miguel Pérez
 “Hay una mujer que ronda mis pasos.
Hay una mujer que me cuida.
Hay una mujer que vigila mis libros
Hay una mujer que no me quiere.
Yo la amo a ella”.


MODELOS PARA  CARTAS DE DESAMORES
Y DE AMORES  EN LA CIUDAD DE LOS ESPEJOS
(Isaías Medina López)

Modelo I
Bajo cero cuando mucho fue encontrarte

Modelo II
Das igual aquí o ausente

Modelo III
Besar el fuego al menos es peligroso

Modelo IV
Tú aunque sea muriendo

(Posdata: Existir sabe a ti)



Versos de María Luisa Lazzaro 
Amor,
la oscuridad
se adueñó de tu planeta,
la claridad poseerá mañana
calles y avenidas,
y volverá el manto oscuro
de entonces
a brillar por las estrellas.

Y yo,
princesa del Medioevo,
con una voz que no llega,
encarnando el cuerpo romántico
de una dama,
dueña de unos versos,
de un pensamiento solitario,
de un indomado orgullo,
de un furioso encuentro con la duda.

Desvelada espero…
con el vestido amplio
de gasa y vuelos, 
y un pañuelito en el suelo.



Versos de Mariela López
¿Dónde quedan todas las nostalgias que he tenido?.
¿Dónde quedan todos mis destinos?
¿Dónde queda mi principio?.
¿Dónde duermo después de mi muerte?
¿A dónde fueron a parar mis ojos luego de verte?
¿Dónde está el fin de mi cordura?
¿Dónde queda ahora mi vida,
sino en la tuya?


Imagen en el archivo de Germán Pérez

2 comentarios:

Marina Seischi dijo...

Wonderful all poems

I loved the poems of Mariela Lopez today

Marina Seischi dijo...

Todos os poemas são preciosos porque falam de amor .